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Varias personas intentan apagar el fuego de los coches tras un ataque con cohetes en Ashkelon, en el sur de Israel, el 7 de octubre de 2023. Credit: Ahmad Gharabli / AFP/Getty Images/CNN

Israel ha declarado la guerra a Hamás y ha lanzado una serie de ataques aéreos sobre la Franja de Gaza después de un devastador ataque sin precedentes por parte del grupo islamista contra territorio israelí. El ataque de Hamás, que involucró el lanzamiento de miles de cohetes, dejó al menos 40 muertos y más de 700 heridos en Israel, según medios locales. En respuesta, Israel ha llevado a cabo una ofensiva que ha resultado en cerca de 200 muertos y 1600 heridos en la Franja de Gaza.

“Estamos en guerra”, declaró el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en respuesta al ataque sorpresa de Hamás en la madrugada del sábado. El ataque consistió en un lanzamiento masivo de cohetes y en la infiltración de milicianos palestinos en territorio israelí, lo que desencadenó enfrentamientos con las fuerzas israelíes.

En respuesta, el Ejército israelí declaró el estado de guerra y puso en marcha la operación “Espadas de Hierro”. Los aviones israelíes bombardearon instalaciones de Hamás en la Franja de Gaza, según fuentes palestinas, resultando en la muerte de alrededor de 200 personas y dejando a 1600 heridas.

“Actualmente, decenas de aviones de combate israelíes están atacando varios objetivos pertenecientes a la organización terrorista Hamás en la Franja de Gaza”, indicó el Ejército israelí.

La escalada de violencia comenzó cuando Gaza lanzó más de 5,000 cohetes hacia Israel y milicianos palestinos se infiltraron en el territorio israelí. El Ejército israelí declaró el estado de alerta de guerra, ordenando a los civiles en áreas cercanas a los refugios y a las comunidades fronterizas con Gaza que se resguarden en sus hogares.

En respuesta a la amenaza, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, aprobó la movilización de soldados de reserva, mientras que las sirenas seguían sonando en múltiples puntos de Israel, incluyendo Jerusalén.

La situación ha resultado en la muerte de al menos tres personas, una en Israel y dos en Gaza, aunque las cifras son provisionales. En una localidad israelí cercana a Gaza, una mujer de aproximadamente 60 años murió debido a un impacto directo de cohete. Además, 15 personas resultaron heridas, dos de ellas en estado grave, seis en estado moderado y siete con heridas leves.

El grupo islamista Yihad Islámica, que tiene una fuerte presencia en Gaza, anunció su participación en el ataque, señalando que luchan junto a Hamás en esta ofensiva.

Hamás, por su parte, informó que ha secuestrado a decenas de soldados israelíes muertos en enfrentamientos en la frontera, y al menos uno sigue con vida. El comandante de las Brigadas de Al Qasam, el brazo armado de Hamás, Mohamed Deif, anunció la operación “Tormenta de Al Aqsa”, que incluyó el lanzamiento de más de 5,000 cohetes hacia Tel Aviv y la infiltración en territorio israelí.

En medio de la creciente tensión, el viceministro de Exteriores ruso, Mijaíl Bogdánov, llamó a la contención de ambas partes, expresando que la escalada del conflicto ha tomado por sorpresa a Rusia. Moscú ha establecido contacto con todas las partes involucradas y busca comprender la situación y sus consecuencias.

Este conflicto en curso subraya la necesidad de una resolución pacífica y duradera en una región plagada de violencia a lo largo de los años. La escalada actual se presenta como un desafío significativo para la diplomacia internacional y un recordatorio de la urgencia de encontrar soluciones a largo plazo.